Ha pasado tantas veces, ha pasado tantas mañanas, ha pasado tantas noches; Así como tantas madrugadas, mis pensamientos se van hacia le infinito, juegan con mi mente, mi vida y mi alma, son como pesadillas, mas bien lindas pesadillas, tentadoras y hermosas, que solo dejan plasmada en mi cabeza la ilusión de encontrar esa persona, que con mis sueños arrasa, pero vuelvo a caer a la realidad que desencantadora, fría, cruel y perturbadora, llega y me abraza, pues ese sueño, se hace trizas me abarca y me orilla a dejar de vivir; puesto que siempre es la misma conclusión, nunca mi sueño llega a consumar.
Quiero vivir pero estas espinas, enterradas no me dejan, intento moverme y me lastiman, intento quitármelas y comienzan mis heridas a sangrar, intento no sentir dolor, pero eso no ayudara, solo al quitarlas sin miedo y dejando que sanen , solo así podre mi cuerpo, mi alma y mi vida sanar.
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